Abstinencia sexual para evitar el sida, no al topless ni hablar español, son algunos “tips”.
“Abstinencia sexual” y “fidelidad” son dos recomendaciones de la Fifa para este Mundial 2014 en Brasil. El consejo es parte de una cartilla que comenzó a circular, en febrero, en las 12 ciudades sede del mega evento futbolístico. El propósito sería evitar que tanto los locales como los visitantes extranjeros contraigan sida durante los 30 días que durará la competencia. Pero la Federación Internacional del Fútbol no se limitó al sexo; publicó su propia tabla de 10 “mandamientos” para los 600.000 hinchas y turistas que vendrán del exterior. Con el título de “Brasil para los principiantes”, a las mujeres se recomienda que no hagan topless en las playas, ya que pueden terminar en la cárcel.
O también que los peatones tengan cuidado al cruzar las calles, inclusive si lo hacen por las rayas blancas, pues aquí no hay cultura británica.
El artículo en cuestión, publicado en el Weekly Fifa, con el presunto objetivo de asesorar a los europeos que desembarcarán en Brasil, es una notable colección de clichés, que pretende describir el comportamiento medio en un país donde hay tantas culturas como estados provinciales (27 en total). El revuelo que armó la publicación ayer obligó a la Fifa a retirar esa edición de la revista electrónica.
Las advertencias tienen un tono jocoso, pero terminan por sonar como un resumen discriminatorio de las costumbres que los europeos le asignan a los “sudacas”. Por empezar, la foto que preside ese vademécum cae en lo habitual: dos hermosas muchachas con una poderosa anatomía en exhibición. A pocos metros, un grupo de muchachos juega un picadito.
El manual de la Fifa continúa con las siguientes observaciones: si va al restaurante a comer asado evite ingerir alimentos hasta 12 horas antes y cuando ya se encuentre sentado ingiera lentamente porque la buena carne “recién la sirven al final”.
En el mismo estilo socarrón, conviene que en Brasil hay poco respeto por el espacio mínimo que requiere cada persona. Y lo dice en estos términos: “Brasileñas y brasileñas no están familiarizado con la costumbre europea de mantener la distancia con el otro como una norma de cortesía”. Abunda con ejemplos del significado del “beso”, que no debe llamar a confusión: “ Es una forma de comunicación no verbal que no implica compromisos ”.
Afirma que “en las calles, los peatones son ignorados, y aun cuando se cruce por las rayas blancas ningún conductor se detendrá voluntariamente ”. De acuerdo al decálogo, “ el español no sirve. Los visitantes que intenten comunicarse en español tendrán la sensación de estar hablando con las paredes”. Por último lanza una fuerte advertencia: “Las imágenes de mujeres con poca ropa, típicas del carnaval, son engañosas y difieren considerablemente de la realidad”. Por consiguiente no se le ocurra “tomar sol en la playa en topless”. Está absolutamente prohibido y quien lo haga terminará en la cárcel.
“Abstinencia sexual” y “fidelidad” son dos recomendaciones de la Fifa para este Mundial 2014 en Brasil. El consejo es parte de una cartilla que comenzó a circular, en febrero, en las 12 ciudades sede del mega evento futbolístico. El propósito sería evitar que tanto los locales como los visitantes extranjeros contraigan sida durante los 30 días que durará la competencia. Pero la Federación Internacional del Fútbol no se limitó al sexo; publicó su propia tabla de 10 “mandamientos” para los 600.000 hinchas y turistas que vendrán del exterior. Con el título de “Brasil para los principiantes”, a las mujeres se recomienda que no hagan topless en las playas, ya que pueden terminar en la cárcel.
O también que los peatones tengan cuidado al cruzar las calles, inclusive si lo hacen por las rayas blancas, pues aquí no hay cultura británica.
El artículo en cuestión, publicado en el Weekly Fifa, con el presunto objetivo de asesorar a los europeos que desembarcarán en Brasil, es una notable colección de clichés, que pretende describir el comportamiento medio en un país donde hay tantas culturas como estados provinciales (27 en total). El revuelo que armó la publicación ayer obligó a la Fifa a retirar esa edición de la revista electrónica.
Las advertencias tienen un tono jocoso, pero terminan por sonar como un resumen discriminatorio de las costumbres que los europeos le asignan a los “sudacas”. Por empezar, la foto que preside ese vademécum cae en lo habitual: dos hermosas muchachas con una poderosa anatomía en exhibición. A pocos metros, un grupo de muchachos juega un picadito.
El manual de la Fifa continúa con las siguientes observaciones: si va al restaurante a comer asado evite ingerir alimentos hasta 12 horas antes y cuando ya se encuentre sentado ingiera lentamente porque la buena carne “recién la sirven al final”.
En el mismo estilo socarrón, conviene que en Brasil hay poco respeto por el espacio mínimo que requiere cada persona. Y lo dice en estos términos: “Brasileñas y brasileñas no están familiarizado con la costumbre europea de mantener la distancia con el otro como una norma de cortesía”. Abunda con ejemplos del significado del “beso”, que no debe llamar a confusión: “ Es una forma de comunicación no verbal que no implica compromisos ”.
Afirma que “en las calles, los peatones son ignorados, y aun cuando se cruce por las rayas blancas ningún conductor se detendrá voluntariamente ”. De acuerdo al decálogo, “ el español no sirve. Los visitantes que intenten comunicarse en español tendrán la sensación de estar hablando con las paredes”. Por último lanza una fuerte advertencia: “Las imágenes de mujeres con poca ropa, típicas del carnaval, son engañosas y difieren considerablemente de la realidad”. Por consiguiente no se le ocurra “tomar sol en la playa en topless”. Está absolutamente prohibido y quien lo haga terminará en la cárcel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario